CREACIÓN DEL ESCENARIO

Problema estratégico en seguridad

¿Qué es el crimen organizado?

 

“son grupos de personas que se dedican a traficar drogas, personas, cometer secuestros, asesinatos, entre otros delitos. También llamado delincuencia organizada, en estos grupos existe cierta jerarquía, roles y funciones. Su principal objetivo es la obtención de beneficios materiales o económicos, mediante la comisión de delitos.” (INISEG, 2019).

     Esta es una problemática que aqueja a nivel mundial, pero en esta ocasión vamos a enfatizar en América Central y es que, con el incremento del crimen organizado, vienen las drogas, el aumento en los homicidios, trafico de armas y violencia.

     La posición geográfica en la que se encuentran estos países no es la más ventajosa, ya que sirve como ruta para el paso de armas ilícitas y drogas entre el Norte y Sur de América, por lo tanto, como se menciona en la tabla anterior, aumenta considerablemente la tasa de homicidios debido a la criminalidad.

“La inseguridad ciudadana se debe al alto número de homicidios y demás actos criminales ocasionados principalmente por un grupo organizado, se observa que las causas principales que explican el crimen organizado giran en torno al desempleo, desigualdad, pobreza, inestabilidad política y discriminación.” (Torres, 2019).

 

Eje de prevención del crimen organizado en América Central

     Anteriormente se hace referencia de que el crimen organizado se incrementa debido a diferentes situaciones que viven las poblaciones en condición de clase media y pobreza extrema, esto por la desigualdad social con la que se vive diariamente.

 A continuación, veremos algunas acciones en cuanto a prevención que se podrían aplicar.

Programas de desarrollo infantil: esto puede traer muchos beneficios ya que se trabaja con la población infantil que se encuentre en riesgo social, invertir en los jóvenes y niños siempre va a ser de suma importancia.

 

Invertir en programas en especial aquellos dirigidos a las familias pobres, ha sido una de las formas más rentables para reducir comportamientos de riesgo entre los jóvenes, que tradicionalmente incluyen asistencia médica, suplementos alimenticios, estimulación mental, actividades educativas y capacitación sobre el cuidado de los hijos, mejoran los resultados del capital humano a largo plazo, incluyendo logros educativos, salud y nutrición, así como en la reducción de comportamientos de riesgo, tales como el crimen y la violencia, el abuso doméstico y el abuso de sustancias. (Banco Mundial, 2011).

 

Programas para la culminación en temas de educación primaria y secundaria: con esto se puede orientar a que continúen en las aulas y culminen sus estudios de manera que se pueden mantener alejado de las calles y con motivación para su superación académica.

 

Las políticas y los programas para promover la inscripción y conclusión de la escuela secundaria son fundamentales. La evidencia muestra que la conclusión de la escuela secundaria es una de las inversiones preventivas más importantes que puede hacer un país en los jóvenes en riesgo, en términos de mejorar su educación y reducir casi todos los tipos de comportamiento de riesgo, incluyendo el crimen y la violencia. (Banco Mundial, 2011).

 

Programas de barrios seguros: por medio del mejoramiento de espacios de recreación y deporte, capacitando a las comunidades en temas de seguridad, se puede poco a poco convertir en un espacio seguro para la convivencia entre jóvenes, sin la constante inseguridad de que sean atraídos por las drogas y violencia. 

“Los programas de barrio seguro pueden modificar los entornos físicos en los que las personas jóvenes actúan e interactúan en forma tal de evitar que dichas personas adopten un comportamiento riesgoso, en especial en los vecindarios ubicados en “zonas rojas de delito”.” (Banco Mundial, 2011).

 

Eje de acción y de investigación criminal

 

     El sistema de integración centroamericana (SICA), consideran debido al incremento del crimen organizado, en conjunto con profesiones de cada país involucrado, un proyecto para el combate de la problemática mencionada anteriormente.

 

El proyecto busca aumentar la eficacia de la justicia penal en la persecución de la delincuencia organizada y el tráfico de drogas a nivel internacional, a través de acciones como: la mejora de las capacidades de las unidades de investigación e institutos forenses y de las redes regionales, desarrollo de operaciones e investigaciones regionales conjuntas contra la delincuencia internacional que contribuyan al desmantelamiento de las estructuras delictivas regionales, entre algunos de los resultados que se esperan en el marco del proyecto. (SICA, 2019).

 

     Esto con la finalidad de un mejor control de la criminalidad que crece cada vez más en los países de América Central y es que, aunque cada uno tenga su organismo encargado a nivel nacional, es importante la unión para combatir esta problemática.